Cultura y Liderazgo

Las 4 señales que determinan si eres un Project Manager por naturaleza

Equipo de trabajo, líder mostrando proyecto, representando las 4 señales que determinan si eres un Project Manager por naturaleza.

He hablado ya de la importancia de hacer conciencia respecto a que vivimos en un escenario inestable y sin certezas (con todo lo que esta afirmación supone), principalmente en términos de gestión del cambio. Las organizaciones se transforman y surgen nuevas necesidades todos los días. Es muy probable que en tu mente esté claro que es tendencia pensar en Project Management o Gestión de Proyectos como parte de la cultura organizacional, normalmente para garantizar el crecimiento acelerado de la misma. Quizá también sería normal para ti pensar en las oficinas de proyectos como entidades estratégicas de las empresas.

Así podríamos pasar horas hablando de tipos de proyectos y sus propósitos, alcance, objetivos, estrategias y planes de trabajo. De las múltiples maneras de gestionarlos. Del rol del Project Manager y su defensa a capa y espada por el cumplimiento del propósito de su proyecto. De la forma en que se logra mantener el orden en un ambiente caótico que rodea a la mayoría de los proyectos y lo complicado que es esto. Pero el día de hoy hablaremos específicamente de las cuatro señales que determinan si eres un Project Manager por naturaleza o no y qué hacer en caso de no identificarlas en tu persona.

  1. Ser capaz de identificar lo que es realmente importante y enfocarte en ello

Los Project Managers por naturaleza se sienten cómodos en sus ambientes, reduciendo la neblina que a menudo pone en riesgo el éxito del proyecto y encontrando las señales que existen en medio del ruido. Los mejores Project Managers lo hacen parecer fácil.

Identifica – Prioriza – Ejecuta

Las personas con habilidades de Gestión de Proyectos innatos tienen la capacidad de funcionar eficientemente a través de las distracciones. Podrías no poseer esa habilidad natural, pero todavía puedes lograrlo a través de la conciencia, entrenamiento y disciplina.

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  1. Ser capaz de generar consenso y liderar

Las habilidades de liderazgo comparten algunas similitudes interesantes con las habilidades atléticas. Nacemos con diferentes capacidades y potencialidades, pero nuestros hábitos y prácticas son lo que realmente hacen la diferencia.

El consenso se alcanza cuando los miembros de un grupo aceptan apoyar la decisión del grupo, incluso si esa decisión no es su elección personal. Lo más difícil de construir consensos es que se requiere siempre del compromiso del líder y juega de manera inversa a lo que comúnmente se cree respecto a los líderes (autoritarios).

Los grandes líderes se miden por la eficacia que tienen para sacar lo mejor de los demás (y de ellos mismos).

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  1. Tener conocimiento y experiencia en el campo

Está claro que no puedes nacer sabiéndolo todo, pero definitivamente creo que puedes manejar proyectos de una mejor manera cuando entiendes la esencia del trabajo a realizar y cómo se ejecutan las funciones comparándolo contra ser nuevo en el campo. Mientras más entiendas el campo en el que trabajas, mejor podrás liderar, medir resultados, determinar planes de trabajo y tomar decisiones en beneficio del proyecto.

Lo sé, hay argumentos contrarios que afirman que un Project Manager no necesita experiencia en el campo. En algunos casos es cierto, mientras los miembros del equipo sean expertos y exista plena confianza entre ellos y el Project Manager. Pero manteniendo las mismas variables, cuanto más conoce éste último mejores serán sus posibilidades de éxito.

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  1. Ser capaz de adaptarte al cambio

La capacidad de adaptarse al cambio es otro rasgo clave que comparten todos los grandes administradores de proyectos, pero este es uno de los que a menudo se pasa por alto. Es común que se elija y promueva a los Project Managers por su capacidad para planificar cuando una habilidad de gestión de proyectos más útil puede ser la capacidad de saber cuándo eliminar el plan y aceptar el cambio a manera de garantizar el propósito del proyecto, el cual debemos defender a capa y espada.

Los planes son acerca de predecir y controlar la incertidumbre, mientras que el cambio introduce la incertidumbre, trasciende el plan y produce incomodidad para muchos. Los Project Managers por naturaleza tienen la habilidad de adaptarse e improvisar, esperan cambios y hacen las correcciones de curso necesarias, todo mientras se mantienen los factores de éxito críticos en foco.

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¿No lo identificas en tu persona?

Un Project Manager por naturaleza no es necesariamente el que hace listas y es brutalmente organizado. En la realidad son los que mantienen el enfoque en el éxito y ayudar a otros a hacer lo mismo, tienen lo que en icorp llamamos : “Make Things Happen”.

Si te encuentras leyendo este artículo y estás comenzando a preocuparte porque no tienes los rasgos de un Project Manager por naturaleza ¡no lo hagas! Estas habilidades pueden ser aprendidas y los que tienen éxito nunca dejan de trabajar para mejorar. La mayoría de nosotros somos una mezcla de talento natural por una parte; y por la otra, un bonche de habilidades adquiridas y de trabajo duro.

Te invito a conocer el PMI (Project Management Institute) y a acercarte a sus capítulos, mismos que te ayudan a entender los conceptos y tecnicismos, así como a conocer lo que plantea PRINCE con una metodología más práctica y con recetas definidas.

Hasta mi siguiente post.

Alberto García H

Emprendedor, millennial, audiófilo y productor musical. Virgo, con personalidad de arquitecto. Líder y estratega. Director General de icorp y evangelista de la Filosofía y el Plan i25.