Pause Festival, un evento de tecnología y cultura en Melbourne, Australia, permitirá la entrada a algunos de sus asistentes con microchips implantados en lugar de boletos físicos.

Con miras a introducir esta medida en un futuro cercano para el público en general, 10 personas con entradas VIP se han ofrecido como voluntarios para implantarse chips NFC (Near Field Communication) en las manos.

Aunque los microchips todavía no están disponibles del todo comercialmente hablando, además de que solo pueden contener un poco de información por ahora, esto no detuvo el experimento. Similar a ponerse un piercing, los asistentes verán insertados el microchip entre sus dedos.

Antes de la implantación, estos son cargados con la información del abono de tres de días del festival, el cual se llevará a cabo en febrero. También serán programados para abrir las puertas de sus casas y otros sitios y para pagar la tarifa del transporte público que utilizan. Finalmente, durante la celebración de Pause Festival, los voluntarios serán parte de un panel, junto a la experta en tecnología Kayla Heffernan, que discutirá si los microchips son verdaderamente útiles.

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Heffernan, entusiasta del uso de microchips y quien tiene dos implantados para poder entrar a su casa y trabajo, anticipa que, en cuanto sea posible pagar con ellos, más gente estará dispuesta a llevarlos consigo.

Fuente: The Next Web