Cultura y Liderazgo

Mapas mentales: una herramienta para la productividad

Un foco dibujado al centro adentro el tema principal a desarrollar y varias flechas que llevan a otras ideas con texto y dibujos creando mapas mentales como herramienta para la productividad

Estudios recientes indican que la productividad laboral se ha incrementado notablemente en los últimos dos meses. En el esquema tradicional solemos decir: “cuando tenga tiempo…“, y así inician nuestras frases de proyectos que nacen destinados a quedar inconclusos. Ahora que tenemos disponible el tiempo que no usamos en los traslados, ¿te ha pasado lo mismo en algún momento? ¿Has sentido que de todos modos no te alcanza? ¿No será que el problema está en tu interior y no en otros factores?

En estos días he aprendido más sobre la productividad, la gestión del tiempo y herramientas valiosas que podemos utilizar para organizar las actividades. No pierdas de vista que cualquiera de estos conocimientos funcionará solo si logras implementarlo.

Hay una herramienta en particular que quiero compartir contigo: los mapas mentales.


¿Qué son, para qué sirven y cómo se hacen los mapas mentales?

Esta herramienta fue diseñada primero por el psicólogo inglés Tony Buzan (para saber más: https://www.tonybuzan.com/). En 2006 lanzó su propio software para generar mapas mentales: MindMapEl término utilizado para plasmar ideas en algo tangible y compatible fue acuñado como mapas mentales.

En palabras coloquiales, se trata de la representación gráfica de una serie de ideas que están relacionadas con un objetivo. Puede ser un nuevo proyecto, un curso que has tomado o información que alguien te compartió o que has ido recopilando acerca de un tema en particular.

Antes de utilizar esta herramienta, asegúrate de integrar una metodología previamente establecida a una forma de trabajo. Cuando surge una idea que nos parece interesante, queremos saber más de un tema en particular o recabar información relevante, y buscamos anotarla para después revisarla con calma.  Revisa que tengas un sitio donde juntes esas «notitas» y agrúpalas por tema siempre en el mismo lugar. Así, cuando tengas calma, podrás acudir sin perder tiempo pensando en dónde quedaron.

Ahora sí, ya que tienes a la mano aquella idea, es momento de empezar a desarrollarla. ¡Y un mapa mental es el método ideal!

Esta herramienta se utiliza para gestión de información, conocimiento, capital intelectual, comprensión de soluciones de problemas, memorización, organización de lluvia de ideas y aprendizaje en general, entre muchas otras aplicaciones.

I D E A (originada en tu cabeza)Mapa mental Siguientes pasos

En la parte central va el nodo, ahí colocarás el tema principal. De este se desprenderán las ramas, que a su vez tendrán otras ramas y así sucesivamente hasta llegar a las que contienen mayor detalle.

Cada una de estas ramas se refiere a un concepto en particular; es necesario anotar palabras clave para que la lectura sea ágil y al verlo podamos hilar las ideas. Generalmente son colocadas para leerse en el sentido de las manecillas del reloj, pero sin que esto sea una restricción.

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Pueden agregarse íconos para categorizar las ideas o asignar prioridades en la ejecución de actividades específicas. Utilizar colores en los mapas mentales estimula ciertas zonas del cerebro, ya que facilita los procesos mentales como la creatividad, organización y el cuestionamiento. Durante el proceso de creación del mapa mental, las neuronas (células del cerebro) generan conexiones. Imagina que, cuando vas generando ramificaciones en el mapa, otro tanto sucede en tu cerebro.

Pensemos en un ejemplo donde vamos a iniciar un nuevo proyecto. El nodo central será el nombre de este, luego empezaremos a analizar qué requiero para iniciarlo y anotaremos en cada rama: personal, recursos económicos, tecnología, infraestructura física, conocimientos, etc. Una vez generadas las principales ramas, cada una de ellas se expandirá hasta el nivel de detalle con el que nos sintamos tranquilos de que hemos considerado todo y no se nos pasa nada.

Si generas un repositorio de mapas mentales, podrás buscar después por palabra clave y ver si puedes reutilizar ideas o revisar por qué un proyecto fue descartado en un momento determinado.

Una vez que el mapa mental ha sido creado, ahora hay que ponerlo en marcha. El siguiente paso sería generar tareas que se convertirán en acciones con ejecutores y fechas.

Hoy en día, hay muchas aplicaciones para hacer mapas mentales, libres y con licencia. Podrás tener la mejor herramienta (qué tal un cuaderno físico, debidamente organizado e identificado), pero el valor agregado está en la metodología que sigas para organizar tus procesos mentales. Si generas mapas mentales que nunca más consultarás, solo estarás perdiendo el tiempo. Si crees que hacer un mapa mental es un proceso tardado y engorroso, no lo harás, pues pensarás en todos los pasos y preferirás brincar a la ejecución.

Debe ser ágil en su generación y útil para ti y otras personas.


En resumen:

  1. Los mapas mentales son herramientas útiles de apoyo para procesos mentales.

  2. Para lograr ser efectivos, deben integrarse con otras herramientas y/o metodologías.

  3. Si organizamos adecuadamente, serán un repositorio que evitará retrabajo.

  4. No requieres un software sofisticado. Un cuaderno destinado para ello puede ser útil.

  5. Como otras herramientas y metodologías, mientras más lo uses, más hábil te volverás en la habilidad de organización de ideas (pasarlas de tu cabeza en un formato organizado y accesible para otros).


Aquí algunas ideas interesantes para empezar a generar tus primeros mapas mentales:

  1. Metas para el 2021. Nodo central: metas 2021. Ramas: enero, febrero, marzo, abril, etc. Ahora ¡a expandir cada una! Puedes generar un mapa mental por mes y almacenarlo. Antes de iniciar cada uno, deriva las tareas y acciones para convertirlas en planes.

  2. Aprendizaje de un nuevo idioma. Nodo central: aprender inglés. Ramas: tiempo, costos, formato, etc.

  3. Viaje al extranjero. Nodo central: viaje. Ramas: destinos; para cada uno, tiempo disponible, costos, acompañante, medio de transporte, etc.

¿Estás listo para generar nuevas conexiones neuronales?

Angélica Murueta

Coordinadora de gestión de procesos en icorp, Angélica participó activamente en la certificación de ISO 20000 para Service Desk en nuestra empresa. Es licenciada en Sistemas de Computación Administración con un Posgrado en Sistemas de Información por el ITESM – CQ. Practica natación y le apasionan los idiomas.