Este día del padre invitamos a nuestros colaboradores en icorp a decirle a sus padres todo lo que tienen en su corazón o aquello que siempre quisieron agradecerles, pero por un motivo u otro no hicieron o no han hecho.

Te compartimos a continuación la carta de una de nuestras colaboradoras a su padre en el cielo.

Querido Papá:

Hace tiempo que no te veo, pero tú sabes que eso no cambia lo que siento por ti, al contrario hace que te valore más y permanezcas siempre en mi pensamiento. Espero leas esta carta porque no me dio tiempo de agradecerte en esos momentos de verdad donde una frase tuya lo cambia todo, de tristeza a alegría y de alegría a más alegría.

Hay momentos que no se me olvidan.. Como cuando me dijiste que no importaba lo que pasara porque nunca te iba a decepcionar y siempre me ibas a querer; ese día cuando sonreías cómo nunca y eras el más feliz y me dijiste que estabas así, porque mi felicidad era tu felicidad aunque implicaba que a partir de ese momento no íbamos a vivir juntos;

Y ese momento cuando de la nada me agradeciste por valerme por mi misma, por ser la persona que soy y eso le daba tranquilidad a tu corazón, me hiciste sentir que era la mejor y fortaleciste mi confianza, para seguir adelante en cualquier circunstancia. También el momento chistoso cuando tiraste tus camisas a la basura y más bien nos las íbamos a llevar a la tintorería… ¿A quién se le ocurre empacarla en bolsa negra? A mí no….

Trato de seguir tu consejo de ser la persona que de alegría y paz a las otras personas, escuchando, animando, motivando y no preocupando. Esos momentos y muchos más, los llevo presentes y solo te agradezco por el haber estado, por lo que tuve la fortuna de tener.

Cuando sea el momento indicado nos volveremos a ver, mientras tanto no tengas duda que soy feliz, disfruto la oportunidad de vivir y en gran parte se lo debo a lo que sembraste en mi corazón.

Te quiero papá.